AMNISTIA INTERNACIONAL

lunes, 19 de septiembre de 2011

No nos consta

Por: Tola y Maruja 

— Oites Tola, caminá pues acompañemos al vice Argelino Garzón a mercar en Paloquemao con 190 mil pesos. 
— Nuu… Esa platica no le da un brinco: se le van 100 mil en rellena y 90 mil en chunchurria… No le queda ni pa la chicha. 
— ¿Qué opinás pues Tola con las que salió Planeación Nacional: que una persona que gane 190 mil pesos mensuales no es pobre? ¿Vos sí creés que 6.300 pesos diarios le alcanzan a una persona pa vivir? 
— Uf… Si no es tragona como vos, hasta le sobra… Lo importante Maruja es tasar los centavitos… Yo me puse en el trabajo de tirar lápiz y te aseguro que uno puede pasar el día con esa plata, siempre y cuando esté desempleado, porque si tiene que salir a trabajar son 3.400 pesos en Trasmileño. 
— ¿O sea que a qué horas se debe levantar uno? 
— Tipo once, doce, pa ahorrarse el desayuno… Serían entonces 500 pesos de un tinto callejero y 200 pesos de un cigarrillo. 
— Pero Tola, está prohibido vender cigarrillos menudiados. 
— Pues toca arrejuntarse con otros nueve fumadores y comprar media cajetilla… Y como tinto y cigarrillo no saben a nada sin periódico, serían otros 100 pesos pa periódico amarillista, también comprado haciendo vaca con los vecinos. 
— Tenés razón, las personas de estrato bajo necesitan consultar los diarios amarillistas pa ver qué conocido salió. 
— Después hay que entretener el hambre, contándole historias… Pero ojo: nada de historias de Haití ni Somalia… Enseguida viene el almuerzo: 1.500 pesos, que viene con frisoles, arroz y pelanga. 
— ¿Pelanga? 
— Así le dicen los rolos a la jeta de res sudada… Deliciosa y tiene colágeno… Enseguida viene la diversión. 
— Claro, cualesquier ser humano necesita distracción. 
— Pa ese rublo destinamos 700 pesos, pero la persona se tiene que ir voliando quimba hasta la Plaza de Bolívar… Serían entonces: 100 pesos pa darle al mimo y 100 pa la estatua humana… Más 500 pa una paleta de agua. 
— O se consigue más barata, si es de agua del río Bogotá, con la ventaja que le saldría premiada: con carne de amibas. 
— Tengo presupuestados 200 pesos pa caridá, o sea moneda de 50 pa cada limornero: Hoy por ti, mañana por mí, pasado mañana por todos nosotros. 
— Ve Tola, ¿tenés previsto el algo, las onces? 
— Claro, tipo cinco de la tarde vienen: 200 pesos de bolsa de agua y 200 de bocadillo veleño. 
— ¿Y la comida, la cena? ¿Agua molida y viento raspao? 
— Esperate: como la persona no puede llegar manivacía por la noche donde la mamá, donde vive de arrimao, son 100 pesos pa una rosa, que a esa hora ya están en realización. 
— ¿Y tenés contemplaos 500 pesos pa comprar el Baloto en compañía con otros 10 vecinos? 
— Por supositorio… La comida serían 300 pesos de aguapanela y 300 de mogolla. 
— Pero Tola, hay que tener en cuenta algo pal licor, porque esa vida no se puede aguantar en sano juicio. 
— Son 200 pesos pa hacer vaca pa media de alcohol antiséptico… Además, la persona duerme mejor y vos sabés que el sueño alimenta. 
— Veo que no mencionás pa nada la educación, vestuario, salú… 
— Educación: tiene que ser autodidacta… Vestuario: uno se defiende con una sola muda negra… Y pa salú, tenemos: interna, 60 pesos de un cetaminofén, y esterna, 200 pesos pa una curita. 
— Ole Tola, no tuvites en cuenta “aquello”… Al menos una relación sesual. 
— Ah, no mija: ahí sí toca que se lo den gratis, en un rastrojo, y sin prenservativo, que vale mínimo 800… Nuevo. 
— Pero nos faltó una variable que modificaría los 190 mil: en época de elecciones hay que sumarle los 20 mil pesos de la venta del voto. 

jueves, 8 de septiembre de 2011

Carta a las izquierdas



Boaventura de Sousa Santos

Sociólogo y profesor catedrático de la Facultad de Economía de la Universidad de Coimbra (Portugal) – - Tomado de Carta Maior

No pongo en duda la existencia de un futuro para las izquierdas, pero su futuro no será una continuación lineal de su pasado. Definir aquello que las izquierdas tienen en común equivale a responder a la pregunta: ¿qué es la izquierda? La izquierda es un conjunto de posiciones políticas que comparten el ideal que todos los seres humanos tienen el mismo valor y constituyen el valor supremo. Este ideal es puesto en duda siempre que hay relaciones sociales de poder desigual, es decir, de dominación. En este caso, algunos individuos o grupos satisfacen algunas de sus necesidades transformando a otros individuos o grupos en medios para sus fines. El capitalismo no es la única fuente de dominación, aunque es una fuente importante. 

Las diferentes formas de entender este ideal han provocado varias divisiones. Las principales han surgido de respuestas opuestas a las preguntas siguientes. ¿Puede el capitalismo ser reformado con el fin de mejorar la suerte de los dominados o esto sólo es posible más allá del capitalismo? ¿La lucha social debe ser conducida por una clase (la clase obrera) o por diferentes clases o grupos sociales? ¿Debe llevarse a cabo dentro de las instituciones democráticas o fuera de ellas? ¿El Estado, en sí mismo, es una relación de dominación o puede ser movilizado para combatir las relaciones de dominación? 

Las respuestas opuestas a estas preguntas estuvieron en el origen de violentas divisiones. En nombre de la izquierda se cometieron atrocidades contra la izquierda; pero, en su conjunto, las izquierdas dominaron el siglo XX (a pesar del nazismo, el fascismo y el colonialismo) y el mundo se volvió más libre e igual gracias a ellas. Este corto siglo de todas las izquierdas terminó con la caída del Muro de Berlín. Los últimos treinta años se han caracterizado, por un lado, por una gestión de ruinas e inercias y, por el otro, por la emergencia de nuevas luchas contra la dominación, con otros actores y lenguajes que las izquierdas no pudieron entender. 

Mientras tanto, libre de las izquierdas, el capitalismo volvió a mostrar su vocación antisocial. Vuelve a ser urgente reconstruir las izquierdas para evitar la barbarie. ¿Cómo recomenzar? Con la aceptación de las siguientes ideas: 

  1. El mundo se ha diversificado y la diversidad se ha instalado dentro de cada país. La comprensión del mundo es mucho más amplia que la comprensión occidental del mundo; no hay internacionalismo sin interculturalismo. 
  2.  El capitalismo concibe la democracia como un instrumento de acumulación; si es necesario, la lleva a la irrelevancia y, si encontrara otro instrumento más eficiente, prescindiría de ella (el caso de China). La defensa de la democracia de alta intensidad es la gran bandera de las izquierdas. 
  3. El capitalismo es amoral y no entiende el concepto de dignidad humana; su defensa es una lucha contra el capitalismo y nunca con el capitalismo (en el capitalismo, hasta las limosnas sólo existen como relaciones públicas). 
  4. La experiencia del mundo muestra que hay muchas realidades no capitalistas, guiadas por la reciprocidad y el cooperativismo, a la espera de ser valoradas como el futuro dentro del presente. 
  5. El siglo pasado reveló que la relación de los humanos con la naturaleza es una relación de dominación contra la que hay que luchar; el crecimiento económico no es infinito. 
  6. La propiedad privada sólo es un bien social si es una entre varias formas de propiedad y todas están protegidas; hay bienes comunes de la humanidad (como el agua y el aire). 
  7. El corto siglo de las izquierdas fue suficiente para crear un espíritu igualitario entre los seres humanos que se distingue en todas las encuestas; éste es un patrimonio de las izquierdas que ellas mismas están dilapidando. 
  8. El capitalismo necesita de otras formas de dominación para florecer (del racismo al sexismo y la guerra) y todas deben ser combatidas. 
  9. El Estado es un animal extraño, mitad ángel, mitad monstruo, pero sin él muchos otros monstruos andarían sueltos, insaciables en busca de ángeles indefensos. Mejor Estado, siempre; menos Estado, nunca. 
Con estas ideas seguirán siendo varias las izquierdas, aunque ya no es probable que se maten las unas a las otras y es posible que se unan para detener la barbarie que se aproxima.